“Ninguna descripción, ninguna ilustración de cualquier libro puede sustituir a la contemplación de los árboles reales y de toda la vida que los rodea en un bosque real” (Rius, 2013:6)

La educación tradicional nos hizo pensar que el proceso de aprendizaje a través de metodologías basadas en la memorización y de actividades implementadas sin un enfoque diferencial de acuerdo a las capacidades y potencialidades de los niños, era la manera más adecuada de educar; sin embargo, se hicieron visibles metodologías pedagógicas alternativas como homeschooling que incorporaron nuevos conceptos basados en la autonomía de los estudiantes y la oportunidad de decidir cómo encaminar el proceso de acuerdo a las características personales del estudiante. Algunos métodos como Waldorf, Montessori, Doman y Reggio Emilia han cambiado la forma de pensar el sistema educativo. Sin embargo, sigue siendo la educación tradicional la alternativa escogida por los padres para la educación de sus hijos; esto ha puesto en evidencia más casos de niños que no se adaptan al modelo y que son rotulados con diferentes diagnósticos clínicos que no mejoran la situación. 

Por tanto, es necesario pensar en un concepto de educación de una mirada integral, la cual incluye la idea de pensar en el homeschooling y el aprendizaje al aire libre como herramienta para incrementar la concentración, motivación escolar y potenciar habilidades, así como propiciar la creatividad y el conocimiento de su entorno biológico. 

Podemos enumerar las ventajas de este tipo de aprendizaje:

• Mejora las habilidades sociales.
• Fomenta el trabajo en equipo.
• Facilita la resolución de conflictos.
• Es llamativo tanto para los estudiantes como para los facilitadores de este proceso.

Si queremos pensar en un desarrollo integral, debemos buscar alternativas como el homeschooling para que los niños disfruten su mundo alrededor y aprendan a través del juego, lo cual repercute positivamente en su desarrollo psíquico, físico y emocional.

Asimismo, es importante mencionar que el proceso de aprendizaje no solo se puede dar en el contexto escolar; es importante, que se incluyan además estas actividades en familia y que se fortalezca el interés de los niños en el contacto con el medio ambiente. Esto puede beneficiar el desarrollo integral, ya que hoy en día, el uso de los aparatos tecnológicos está afectando el mismo, ya que la dependencia a estos puede causar baja concentración y atención superficial, así como poca interacción con su entorno. Si bien la tecnología es necesaria en el proceso de aprendizaje, debe considerarse como una herramienta de apoyo al proceso educativo.